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Karol G estrenó en Medellín, su ciudad natal, su documental de Netflix Mañana fue muy bonito, que narra detalles inéditos de su gira ‘Mañana será bonito', un tour mundial que rompió récords por su impacto cultural, el número de estadios llenos y boletas vendidas.
Sin embargo, uno de los momentos que más ha llamado la atención de la premier del audiovisual, disponible en la popular plataforma de streaming a partir del 8 de mayo, fue cuando habló sobre su relación sentimental con el reguetonero Anuel AA. “Fue un infierno. Me despertaba y sentía que me iba a morir”, confesó La Bichota al describir lo tóxica que fue esa etapa en su vida.
La intérprete de Provenza contó que perdió su autoestima, que sufría constantemente y que salir de ahí parecía imposible. "Lo bonito que dejó de todo fue que, por medio de mis canciones, tuve la oportunidad de hablar por muchas personas que a veces no saben cómo expresar lo que sienten", añadió la colombiana.
La artista de 34 años, quien ha estado alejada de los reflectores desde el fin de su gira, se emocionó al compartir con sus fanáticos y hasta cantó varios fragmentos de sus temas más emblemáticos en una plataforma rosada diseñada para la ocasión, que contrastaba con el brillante vestido negro del diseñador Andrés Pajón que utilizó para la ocasión.
Los seguidores de la colombiana también pudieron disfrutar de varias actividades: karaoke, stand de maquillaje, estudio fotográfico y hasta un ring de boxeo hubo en el parque ubicado al lado del Museo de Arte Moderno de Medellín.
A su vez, en sus redes sociales, Karol G dedicó unas emotivas palabras sobre esta producción: “Es una historia de sueños que parecían imposibles y que se alimentaron de una fe inquebrantable. Mi vida, mi trabajo, mi verdad. Es mi sueño hecho realidad”.
La directora del documental, Cristina Costantini, cineasta ganadora del premio Emmy, contó al medio colombiano Vanguardia que uno de los retos fue que la cantante se sintiera cómoda frente a la cámara y por eso les tomó tiempo. Al final en la grabación del documental hubo muchos momentos en los que solo quedaba Karol, la directora, un camarógrafo y alguien de sonido.